martes, 11 de agosto de 2009

Diario de Eva:

"Cuando miro atrás, el Jardín me hace un sueño. Era hermoso, inconmesurablemente hermoso y cautivador. Ahora lo he perdido y jamás volveré a verlo.
El Jardín se ha perdido, pero le he encontrado a él, y me siento feliz. Me ama en la medida que puede; yo lo amo con toda la fuerza de mi apasionada natualeza, y esto, creo, es propio de mi juventud y mi sexo...
Es mi oración y mi anhelo que muramos juntos, un deseo que jamás perecerá, sino que encontrará cobijo en el corazón de cualquier esposa amante hasta el fin de los tiempos y llevará mi nombre.
Pero si alguno de nosotros tuviera que marcharse antes, ruego que sea yo; pues él es fuerte, y yo débil, y no le soy tan necesaria como él a mí. La vida sin él no sería vida, ¿cómo podría soportarla? Esta oración también es inmortal y no cesará de entonarse mientras mi raza siga con vida. Soy la primera esposa, y la última seguirá repitiéndola."

No hay comentarios:

Publicar un comentario